La calidad del aire, principal amenaza ambiental para la salud pública

Polución
REUTERS
Publicado: miércoles, 24 enero 2018 8:11

   MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El Índice de Desempeño o Rendimiento Ambiental (EPI, por sus siglas en inglés) de 2018 encuentra que la calidad del aire es la principal amenaza ambiental para la salud pública. Ahora en su vigésimo año, el informe bienal es producido por investigadores de las universidades de Yale y Columbia, en Estados Unidos, en colaboración con el Foro Económico Mundial.

   El décimo informe del PAI clasifica a 180 países en 24 indicadores de actuación en diez categorías de temas que cubren la salud ambiental y la vitalidad del ecosistema. Suiza lidera el mundo en sostenibilidad, seguida de Francia, Dinamarca, Malta y Suecia, según los resultados de este análisis.

   La clasificación más alta de Suiza refleja un sólido esfuerzo en la mayoría de los problemas, especialmente la calidad del aire y la protección del clima. En general, las altas puntuaciones exhiben compromisos de larga duración para proteger la salud pública, preservar los recursos naturales y desacoplar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la actividad económica.

   India y Bangladesh están en la parte inferior de la clasificación, y Burundi, la República Democrática del Congo y Nepal se encuentran entre los cinco primeros. Los puntajes bajos en el EPI son indicativos de la necesidad de esfuerzos nacionales de sostenibilidad en varios frentes, especialmente la limpieza de la calidad del aire, la protección de la biodiversidad y la reducción de las emisiones de GEI, según los investigadores. Algunas de las naciones de menor rango se enfrentan a desafíos más amplios, como el malestar civil, pero las bajas calificaciones de otros pueden atribuirse a un gobierno débil, señalan.

   Estados Unidos ocupa el puesto 27 en el EPI de 2018, con buenas notas en algunos temas, como el saneamiento y la calidad del aire, pero un rendimiento bajo en otros, incluida la deforestación y las emisiones de gases de efecto invernadero. Este ranking coloca a Estados Unidos cerca de las naciones industrializadas, detrás de Francia (2º), Reino Unido (6º), Alemania (13º), Italia (16º), Japón (20º) y Canadá (25º).

   De las economías emergentes, China e India se ubican en el lugar 120 y 177, respectivamente, lo que refleja la presión que las presiones demográficas y el rápido crecimiento económico imponen al medio ambiente, señalan los investigadores. Brasil se ubica en el lugar 69, agregan, lo que sugiere que un enfoque concertado sobre la sostenibilidad como una prioridad política dará sus frutos, y que el nivel y el ritmo del desarrollo es solo uno de los muchos factores que afectan al desempeño ambiental. Los resultados de sostenibilidad entre las economías emergentes siguen siendo muy variables.

   Seychelles se clasifica como el país que más ha mejorado en la última década, debido en gran parte a su compromiso de combatir las emisiones de gases de efecto invernadero. Santo Tomé y Príncipe, Kuwait y Timor-Leste también aumentaron su clasificación debido a varios factores, como el establecimiento de áreas que protegen la biodiversidad y el hábitat. Burundi, la República Centroafricana, Madagascar, las Bahamas y Letonia disminuyeron significativamente en el desempeño ambiental, en gran parte debido a una actuación inferior al promedio en el cambio climático. Todos los análisis de tendencias se basan en la retro-edición de los métodos de EPI de este año sobre datos históricos.

MEJORAS EN EL SANEAMIENTO Y EL AGUA POTABLE

   El EPI 2018 ofrece no solo una instantánea de dónde se encuentran los países en la actualidad, sino que también refleja tendencias importantes en el desempeño ambiental a nivel nacional y mundial. En general, la comunidad global está mejorando en una serie de cuestiones, como los resultados de salud relacionados con el agua potable y el saneamiento y la protección de los ecosistemas marinos, mientras que en otros temas persisten desafíos importantes.

   Las pesquerías continúan deteriorándose en la mayoría de los países, con importantes problemas en El Salvador, Papúa Nueva Guinea y Portugal. Poblaciones sustanciales todavía sufren de mala calidad del aire, sobre todo en India, China y Pakistán. Y en algunos asuntos, un pequeño número de países no está abordando problemas críticos. Indonesia, Malasia y Camboya, por ejemplo, han experimentado una importante deforestación en los últimos cinco años, lo que refleja amplios fallos políticos, apuntan los investigadores.

   El análisis de los impulsores de políticas que subyacen en las clasificaciones del EPI 2018 deja claro que los ingresos son un determinante importante del éxito ambiental, apuntan los autores, señalando que las inversiones en agua potable y saneamiento moderno, en particular, se traducen rápidamente en mejores resultados de salud ambiental. Sin embargo, en todos los niveles de desarrollo, algunos países logran puntuaciones que exceden a sus naciones pares con circunstancias económicas similares, lo que demuestra que la buena gobernanza y la cuidadosa elección de políticas también afectan a los resultados, agregan.

   "A medida que la comunidad mundial persigue nuevos objetivos de desarrollo sostenible, los responsables políticos deben saber quién lidera y quién se está quedando rezagado respecto de los desafíos energéticos y medioambientales", plantea Daniel C. Esty, director del Centro de Derecho y Política Ambiental de Yale y profesor de Hillhouse en Universidad de Yale.