Uso inadecuado de la sujeción química en residentes ¿qué riesgos puede provocar?

Jornada
CEAFA
Actualizado: viernes, 29 junio 2018 15:07

MADRID, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los expertos que han participado en la Jornada Técnica sobre 'Sujeción química en centros residenciales' han alertado de que actualmente existe un alto grado de evidencia sobre los riesgos que el uso inadecuado de estos fármacos conlleva, en especial en el caso de las benzodiacepinas de vida media larga y, sobre todo, de los antipsicóticos.

Esta jornada ha sido organizada por la Fundación del Centro Hospitalario Benito Menni de Elizondo ha organizado la Jornada Técnica sobre 'Sujeción química en centros residenciales' con la colaboración de la Asociación de Familiares de Alzheimer de Navarra(AFAN),Confederación Española de Azheimer (CEAFA), Fundación Maria Wolff y la Agencia Navarra para la Autonomía y Desarrollo de las Personas (ANADP).

Según han comentado los participantes en la mesa redonda la utilización inadecuada de psicofármacos se relaciona con una serie de resultados adversos para la persona afectada de demencia, entre los que cabe destacar un aumento de la mortalidad por eventos cardiovasculares, aumento de caídas, deterioro cognitivo, inmovilidad, síndrome confusional y deterioro de la calidad de vida.

Asimismo, en la mesa redonda, el doctor Manuel Martín Carrasco, del Centro Hospitalario Benito Menni, ha abordado el concepto de sujeción química, el cual se refiere a "la utilización de fármacos para limitar la libertad de las personas sin que exista una indicación médica para ello".

El doctor ha puesto algunos ejemplo de cómo, en ocasiones, existe en los centros una conveniencia organizativa que prima sobre las necesidades de las personas atendidas y "en el campo de las demencias, puede ser preferible para la institución que una persona afectada permanezca sentada largas horas, no grite al pedir atención, no deambule o que pase en la cama por la noche muchas horas, aunque sus necesidades de sueño no sean tan elevadas".

En este sentido, ha explicado que "el 90 por ciento de las personas con demencia pueden presentar en algún momento de su evolución uno o varios de los denominados síntomas psicológicos y conductuales de la demencia, y su tratamiento puede requerir el empleo de psicofármacos, las sustancias más empleadas habitualmente para la denominada sujeción química".

LA FAMILIAS: LA IMPORTANCIA QUE TIENEN SOBRE EL PACIENTE CON ALZHEIMER

En su intervención, Idoia Lorea de AFAN, resaltó la importancia del papel que juegan las familias de las personas afectadas por la enfermedad de Alzheimer y otras demencias, dado que en la medida que la persona afectada va perdiendo su capacidad de decidir por sí misma, es la familia la que participa en el proceso de toma compartida de decisiones en el que se basa una prescripción de calidad.

"El papel de la familia no solo no disminuye con la admisión en un centro residencial, sino que se acrecienta, y los nuevos modelos asistenciales le otorgan un papel de colaborador fundamental en la asistencia. Sería muy interesante que existiera un protocolo ante el ingreso en una residencia, tanto para la persona con la enfermedad como para los familiares y profesionales", ha especificado Lorea.

En definitiva "es muy buena noticia que se vayan implantando estos criterios Chrome, pero es necesario que existe una formación de todos los agentes implicados en la atención al enfermo, porque esa formación va a hacer que cambie la actitud y este cambio de paradigma necesita de tiempo para interiorizarlo, y es fundamental la comunicación entre todos los agentes para que sea posible dar este cambio", ha resaltado la especialista.

Por su parte, Javier Olazarán de la Fundación Maria Wolff incidió que "en este contexto, y dado el creciente número de personas afectadas por demencia en España, resulta tremendamente importante realizar una prescripción adecuada de estas sustancias, y con esta finalidad se desarrollaron los criterios CHROME (Chemical Restraints Avoidance Methodology), elaborados por un panel de expertos coordinado por la Fundación Maria Wolff con el objetivo de reducir las sujeciones químicas en las personas con demencia que viven en residencias y de promover una prescripción de psicofármacos de calidad, dentro de un marco legal y ético".