¿Cómo atender a los familiares de las víctimas del Airbus siniestrado?

Familiares del avión estrellado llegan a El Prat
Foto: ALBERT GEA / REUTERS
Actualizado: martes, 24 marzo 2015 18:09

MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -  

   El accidente del Airbus de GermanWings en los Alpes este martes ha causado previsiblemente la muerte a unas 146 personas que viajaban en él. Sin embargo, no son las únicas víctimas; sus familias tendrán que enfrentarse ahora al sufrimiento, el dolor y la desesperación por estas muertes tan repentinas e inesperadas. La atención en las primeras horas es crucial.

   A estas emociones se añade el tremendo impacto o angustia que produce en las familias la continua emisión de imágenes del avión accidentado a través de los diferentes canales de televisión, lo que hace más difícil que encuentren un momento de reposo para asimilar los hechos, explican Sara Losantos y Pilar Pastor, psicólogas de la Fundación Mario Losantos del Campo, que ofrece asistencia psicológica gratuita a personas que han perdido a un ser querido.

   A menudo se piensa que la sociedad está acostumbrada a las imágenes de las tragedias que se emiten diariamente en el telediario, a escucharlas sin apenas inmutarnos. De hecho, "nos protegemos de la sacudida y del impacto que nos producen para no ser devorados por el horror y que eso nos permita ayudar en algunos casos y en otros simplemente seguir adelante", explican, pero la situación de los familiares es muy distinta.

   Cuando se produce una tragedia de grandes dimensiones, como un accidente de avión, la ayuda que se puede brindar a los familiares de víctimas puede resumirse en tres pautas fundamentales que ofrecen estas expertas:

   - Cercanía: es necesario respetar las necesidades de cada persona, pero es probable que el contacto físico -una mano en el hombro, un apretón, un abrazo sentido-, resulte de gran ayuda para muchos dolientes. En estos casos donde se genera tanta intensidad emocional, resulta muy difícil no implicarse de alguna manera. También es clave no dejar solos a los familiares de las víctimas durante estos primeros momentos.

   - Respetar la expresión emocional del doliente. Esto hay que hacerlo sea cual sea su respuesta ante la noticia del accidente, evitando poner normas ni tampoco plazos a su proceso de duelo. La respuesta que da cada individuo ante una tragedia de estas características es siempre diferente y la mejor que puede dar, ya que no existe ni un solo duelo igual a otro. Además, es imposible que el proceso se ponga en marcha de manera normal en estos casos, porque la constante exposición informativa no deja espacio para ello.

  - Evitar el bombardeo informativo. Los familiares de las víctimas están suficientemente informados. El exceso de imágenes del accidente emitidas por televisión y la referencia constante al mismo en las noticias sirve para informar a los espectadores no implicados, pero a veces choca con la necesidad de protegerse y apartarse de la realidad que tienen las familias, pudiendo provocarles un efecto de retraumatización.

   Debido a la exposición informativa, los afectados por esta clase de tragedias parecen perder el derecho al anonimato, advierten estas expertas. "También pierden sobre todo, el derecho a la negación, ya que en una situación corriente de pérdida, el deudo trata de protegerse de la muerte de su familiar negándola --explican--. Se trata de un mecanismo natural que permite amortiguar el golpe, pero que no es posible desarrollar ante la evidencia de las imágenes".

   Por ello, recomiendan protegerles del "aluvión informativo" que pueden ofrecer los medios de comunicación para evitar los efectos nocivos derivados del mismo.

ACCIDENTE DE AVIÓN, ¿Y LOS NIÑOS?

   En el caso de haya niños que entre los familiares de las víctimas, para atender su duelo adecuadamente hay que tener en cuenta:

   - Que la exposición a tragedias como un accidente de avión puede generar un gran impacto. Por eso hay que explicar a los menores lo que implica y también que no se trata de un suceso habitual, para que no desarrollen miedos asociados.

   - Si han perdido a algún familiar en la tragedia, hay que comunicárselo lo antes posible y protegerles de los medios para que no revivan los hechos. También habrá que explicarles qué son los accidentes y sus implicaciones.

   - Es necesario garantizar que mantienen su rutina, que puedan seguir realizando en la medida de lo posible las mismas actividades que hacían hasta ahora (colegio, comidas), permite que los niños se sientan más seguros.